Revolución ciclista desde un bar

 

La  aldea gala de la movilidad sostenible en Peñarroya es una cafetería

Fíjense detenidamente en la imagen. Lo ven perfectamente. Es un aparcamiento de bicicletas.  Habránvisto tantos en las ciudades y en la vía verde (versión madera) que es posible que no les sorprenda. Hasta ahí todo normal.

Ahora presten por un momento atención al entorno del artilugio. No es un edificio público estilo biblioteca, un Ayuntamiento, un Centro de salud o un hipermercado, en definitiva, espacios públicos que albergan entidades con responsabilidades cívicas o con el deber de   fomentar hábitos positivos en la ciudadanía.

El lugar en el que está instalado es un bar. Además, es uno de los más concurridos de Peñarroya-Pueblonuevo y uno de los más visitados por usuarios motorizados, esto es, que acuden al bar en coche o en moto ¿Se trata de un adorno del dueño del bar? ¿Tal vez una foto trucada con photoshop? ¿Es  un acto de responsabilidad social corporativa? Pues no, está ahí porque se usa, porque existe un buen número de clientes que van ese establecimiento en bici de modo que su dueño ha tenido la gentileza de hacerles más cómoda la estancia en su negocio colocando esta herramienta.

Aparcabicicletas ubicado ubicado en  el km. 6,4 la Vía verde de La Maquinilla

Evidentemente no tenemos datos oficiales ni estudios que avalen el aumento del uso de la bicicleta  recreativa en la comarca, pero sólo hace falta salir a pasear un  fin de semana por la vía verde de La Maquinilla o por el casco urbano de nuestros pueblos en un día cualquiera para comprobar que se ha dado un cambio de tendencia en los hábitos de uso de la bicicleta entre nuestros vecinos, pasando de ser  visto como un juguete puramente deportivo a formar parte de su rutina diaria.

A ello ha contribuido de manera indudable   la construcción de Vías verdes en el Guadiato. El hecho de tener al lado de casa una ruta más o menos larga,  accesible y   segura desde el punto de vista del tráfico ha invitado a gente de diferente nivel de condición física a desempolvar la vieja bicicleta que no usaba desde la adolescencia o adquirir una baratita bicicleta de montaña  para dar ligeros paseos en familia o con amigos  por nuestros alrededores. El resultado ha sido la presencia de decenas de usuarios de bicicleta, que no ciclistas (es antiguo este concepto) en nuestras calles.

De modo que un Patrimonio Industrial denostado, abandonado e ignorado hasta hace muy pocos años debidamente aprovechado está creando una sociedad más sana, con una mayor conciencia medioambiental y más culta. La formación de una sociedad, digamos, actual, tiene más valor que el millón de euros en forma de contratos sociales e inversiones que ha entrado en nuestra comarca desde que iniciamos este proceso, porque ese cambio no se pierde, o se gasta, como el dinero, sino que permanece en el tiempo, siendo esta la base del verdadero progreso.

La sociedad ya demanda más carriles-bici y menos asfalto en la localidades del Guadiato. 

Por ello, nuestras instituciones locales, que como en todas partes y en todas las épocas, suelen  ir detrás de la sociedad en la que se desarrollan deben atender a esta nueva y silenciosa realidad que se está imponiendo en nuestros pueblos como es la generalización del uso de la bicicleta. Un buen primer paso sería que  comenzasen a prever carriles bici en las nuevas obras de calles o incluso en las existentes, siempre que su anchura lo permita (una gran oportunidad perdida ha sido, por ejemplo, la avenida José Simón de Lillo de Peñarroya-Pueblonuevo) y dotar de  aparcamientos para  bicicletas a los servicios básicos de nuestra localidades. El Plan de movilidad sostenible suscrito entre Ayuntamiento y Diputación de Córdoba el pasado mes de Julio es un buen comienzo. Estamos impacientes por conocer su utilidad y que sirva para promover esta  nueva forma de movilidad que no viene del futuro o de la ciudades, como muchos catetos piensan todavía, sino del presente.

La Avda José Simón de Lillo ha sido una oportunidad perdida para fomentar la movilidad sostenible en la ciudadanía

Desde este medio de comunicación  damos la enhorabuena al/la propietario/a del Bar “La Piscina” de Peñarroya-Pueblonuevo por la gran  iniciativa de colocar un aparcabicicletas en su establecimiento. Es un modelo a imitar por otros y   un gesto iconoclasta porque rompe con el ambiente no saludable de este tipo de lugares ¿Quién dijo que una revolución verde no podía empezar en una cafetería? ¿Qué bar quiere ser el siguiente? Usa la bicicleta. Ya sabemos que los bares están contigo.

 Si quieres colaborar con  proyecto, puedes enviar tu  donación:

Número de cuenta Asociación La Maquinilla

                                                   IBAN     ES1831870586674721079814                     

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