Revista Aires de Córdoba número 230 |
Quienes nos conocen bien saben
que el trabajo que desempeñamos en La Maquinilla no está sujeto a los dictados
del postureo general o de las
fotografías oficiales. Es más, si alguna vez recurrimos a estos medios de
expresión o de comunicación es para denunciar aquello que no se está haciendo
bien en el algún sentido por parte de nuestras administraciones, algo que en el lenguaje actual significa sacar la cara para que te la partan.
Aparecemos en las fotos cuando es
estrictamente necesario, Qué le vamos a hacer. Nos gusta el anonimato, porque
lo que nos hace disfrutar es hacer cosas
por nuestra tierra en materia de Patrimonio Industrial y, por extensión, hacer cosas por nuestra gente.
Quizá sea por esto por lo que
nunca demandamos premios ni reconocimientos públicos y será difícil que nos
vean en este tipo de saraos. Simplemente, estamos ahí, tratando de construir
una sociedad mejor y un pueblo mejor allá donde estamos o donde se nos permite
estar.
Es por ello que cuando a alguien
de nuestro entorno se
le ocurre citarnos o ponernos como ejemplo a veces
quedamos sin quererlo bloqueados y sin saber qué decir, más que nada por
falta de experiencia en esto de destacar.
Revista Aires número 231 |
Así, de esta forma y con este
perfil hemos recibido la publicación de nuestra labor en la Revista Aires de Córdoba: con una mezcla de sorpresa
a la vez que de orgullo.
Para quienes no conozcan esta
publicación, explicamos que Aires de Córdoba es una revista de difusión cultural
de carácter mensual con mucha tradición
en la sociedad cordobesa (24 años de antigüedad), creada por una asociación del
mismo nombre y cuyo único objetivo es difundir y dar a conocer la riqueza
cultural de la ciudad de Córdoba y su provincia.
Bien saben aquellos que se dedican
a los asuntos públicos tal y como lo hacemos nosotros que la resolución
de los asuntos del presente y el futuro dejan
poco tiempo y menos ganas para hacer un repaso general sobre
nuestro propio pasado de ahí que los
reportajes que nos ha dedicado Bartolomé Olivares nos hayan servido, más que para presumir, si para ser
un poco más conscientes de lo que hemos cambiado en estos 8 años cuando
empezamos con algunos sueños y nada de dinero en los bolsillos y lo que ha
cambiado nuestro territorio para bien
allá donde hemos actuado.
Vaya nuestro agradecimiento, por
tanto, a los redactores de Aires de
Córdoba por su valentía por sacar a la luz la
belleza de una parte de la provincia históricamente
ignorada por la sociedad cordobesa como
la del Patrimonio Industrial y
lógicamente nuestras felicitaciones a Bartolomé por
hacer reflexionar a nuestros vecinos de
ciudad que en
el mundo rural que les rodea además de leche, jamón, aceite o vino
también hay ciudadanos comprometidos con la cultura de todos.
Enhorabuena a la Revista Aires de
Córdoba y Enhorabuena a Bartolomé, por habernos colocado en el centro del escenario, un escenario donde jamás pensamos que merecíamos
estar y por practicar la vanguardia, que no es otra cosa que poner foco de lo incómodo
justo hacia donde nadie solía o quería mirar.
A partir de hoy los artículos de la Revista Aires pasan a formar parte de la historia de nuestra asociación y se incorporan a la vitrina de nuestros méritos colectivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario