La Maquinilla: El esfuerzo es el premio

Foto Jéssica Rebollo

Hay cosas que sólo pueden ser entendidas si las relacionamos con otras. Por ejemplo, no podemos entender al Valle del Guadiato sin citar las minas de carbón, del mismno modo que no hablar de la Vía Verde de La Maquinilla sin el IES José Alcántara. Es más, podríamos decir que en este Centro Educativo se encuentra el origen de la iniciativa cívica por una Vía Verde en el Guadiato.

Posteriormente, como todos sabemos, este movimiento estudiantil y docente inaugurado en 2011 con el famoso Proyecto Camino del Guadiato, fue extendiéndose a la sociedad civil en forma Asociación específica, la primera de Andalucía, a la gente corriente y a las instituciones de todo rango.

Afortunadamente, los avances que en materia de inversiones y empleo (A finales del Noviembre será inaugurado un nuevo PROFEA por valor de 62.000 Euros) y obras (ampliación de la Vía Verde hasta Cámaras Altas) se han realizado en el último año han ido borrando aquellos orígenes humildes de pincel, pico, pala y azadón, unos tiempos, no tan lejanos como pensamos, en que los jóvenes belmezanos plantaban árboles de cuarta y media (hoy los que se colocan son de dos metros) pintaban traviesas de hormigón (las que se colocan hoy son profesionales), construían papeleras (hoy en día son profesionales) o vestían una caseta con vistosos colores. ¿Qué ha sido de este Centro en este apartado? ¿Qué hacer cuando existen empresas y entidades locales que ya hacen el trabajo que antes ejecutaba esta comunidad educativa?

Por muy desarrollado que esté el compromiso de nuestras entidades locales, por muy grande que sea el nivel de concienciación de la ciudadanía, aún quedan aspectos complementarios en la Vía Verde por cubrir que la hacen mejor, más cómoda o, simplemente, más nuestra y que no pueden satisfechos éstos. Esta es la nueva frontera de trabajo en que se encuentra este instituto.

Foto Inma Ruiz

Así, durante el curso académico pasado continuaron construyendo protectores de madera que embellecían el trazado además de mejorar la supervivencia de los árboles y realizaron un taller de cajas nido con el objetivo de recuperar la avifauna de la Vía Verde.

El pasado Día 5 de Noviembre, como antaño, un grupo de 35 alumnos de 4º ESO de este Centro participaron en una jornada medioambiental en la Vía Verde de La Maquinilla en la que colocaron con la ayuda de los bomberos del Parque de Peñarroya-Pueblonuevo parte de los trabajos realizados en el curso 2014-2015. De paso repoblaron algunas zonas que permanecen aún sin vegetación después de 4 años plantando 30 árboles de pequeño y mediano porte.

La Corporación Municipal del Ayuntamiento de Belmez también acudió a la actividad, quedando demostrado, una vez más, el compromiso que desde hace años tiene el Consistorio de esta localidad el proyecto de Vía Verde del Guadiato.

Sin embargo, más allá de los beneficios que para la población en general y para la zona ha reportado el esfuerzo de estos chavales, los cambios educativos que adquieren estas nuevas generaciones son los más importantes, en primer lugar porque son positivos, en segundo lugar, porque son irreversibles: conciencia medioambiental, gusto por la movilidad sostenible, respeto por la historia de su lugar de origen, su cultura, sus raíces y aplicación de valores democráticos son aspectos fundamentales que debe incorporar cualquier ciudadano moderno y que quiera llamarse como tal.

Todas estas iniciativas en pos de la Vía Verde del Guadiato, unidas a otras tantas relacionadas con la actividad física, la religión, la integración y la tolerancia han hecho del IES José Alcántara una referencia provincial en torno a la educación en valores. No en vano, representará a la provincia junto a otros dos Centros en los premios andaluces a la convivencia que la Consejería de Educación concede todos los institutos que más innovan y más progresan en esta materia.

No importa el resultado del concurso. El esfuerzo es el premio. Un esfuerzo más que les permitirá ganarse la vida dignamente y defender a sus pueblos, dondequiera que estén, dondequiera que vayan.

Nota: agradecemos a Eva Ibáñez como propietaria de la finca próxima a la Vía Verde, la cesión de los árboles para la colocación de la cajas-nido. Sin su generosidad esta actividad no hubiese sido posible.