jueves, 8 de mayo de 2025

LA SMMP Y LA HISTORIA DEL EDIFICIO QUE NUNCA EXISTIÓ

 

Cianotipo del palacete de la SMMP que albergaría las oficinas de la fundición del Cerco y de todas las fundiciones de la compañía en España

A medida que nuestra asociación se ha ido desarrollando, esto es, desde los inicios en los que  todo el mundo nos veía como unos lunáticos hasta  que nos hemos convertido en un colectivo con cierta utilidad para algunos ciudadanos, se ha ido acelerando  el número de hallazgos en lo referente a documentación,  planos y  objetos los cuales  nos han permitido iluminar algunos rincones de una multinacional SMMP y de paso medir   su dimensión  técnica, económica, propagandística y  etnográfica.

Es así como poco a poco vamos reconstruyendo o mejor dicho escribiendo un relato objetivo sobre lo significó para nuestra zona ser un coto privado de esta compañía industrial, minera, colonial y oligopólica francesa.

Por suerte, gracias a que nuestros vecinos empiezan a entender  que La Maquinilla es una entidad con capacidad para conservar, proteger, poner en valor y difundir patrimonio industrial de todo tipo  continúan llegando a nuestra sede donaciones  de esta empresa  que en algunos casos  tienen alguna conexión con el presente  o  en otras  nos hablan de sueños  que  nunca se  materializaron.

En este último aspecto consideramos paradigmático y sin duda excepcional el plano cedido por María Isabel  Barquero, delineante peñarriblense felizmente jubilada en  ENCASUR, relativo al diseño de unas oficinas exclusivas e independientes  para el servicio de fundición de esta sociedad.

Sin fecha que permita datarlo, con la bendición del director de la compañía y  la aprobación del jefe de servicio de la SMMP,  las dimensiones  y el lujo que destila el edificio  permiten  iba a ser  pagado por franceses, que había sido diseñado por franceses y, lógicamente construido  para que trabajaran franceses en él. Bueno, algún español también entraría, pero no cualquiera. En tanto que todo es terreno resbaladizo porque sólo tenemos este trozo de papel azul, entendemos que los objetivos perseguidos con el proyecto eran, por un lado,   ofrecer un espacio a la altura de  la verdadera y más rentable vocación de la compañía como lo era el área metalúrgica y, por una parte,  hacer patente de forma física su  poderío industrial a trabajadores  y   a la  fauna financiera que visitara Pueblonuevo del Terrible  para hacer negocios.

En tanto que no se han encontrado testimonios orales ni documentos  complementarios que permitan acreditar mucho más respecto a esta singular  construcción,  el sentido común nos sugiere que  fue concebido en la oficina de planos del Cerco Industrial  al igual que la mayoría de   inmuebles contemporáneos construidos  en la etapa de mayor esplendor de la SMMP (Almacén Central, Dirección, Papelera y Yutera), es decir, durante los años previos a la I Guerra Mundial y en su desarrollo (1914-1918). Y es que para ejecutar este tipo de obras tan caras y, por qué no decirlo, tan innecesarias desde el punto de vista económico cuando puedes "apañar" a tu legión de ingenieros en unas oficinas más modestas es porque la SNMP en aquel momento en que se propuso la idea plasmada en el  plano ganaba suficiente dinero como para gastarlo, que no invertirlo, en obras fabulosas como esta.

 

Audioguía VERSAILLES - Trianon - Guía Turística | MyWoWo
El palacete  construido por  la SMMP  guarda similitudes arquitectónicas con el Petit Trianon de Veralles

 

Otros detalles como el reloj  y el par de esfinges  bajo el entablamento,   aventuramos que dedicada  al señores Charles Ledoux y Armand  Malye, indican que el emplazamiento previsto no debía   ser el interior del Cerco Industrial sino más bien un  espacio público de la colonia francesa de  Pueblonuevo del Terrible. Se nos ocurren varias opciones: la explanada contigua  al edificio de la Dirección, hoy llena de pisos, la plaza de Santa Bárbara, arrasando evidentemente algún grupo de  viviendas-jardín del perímetro, que para eso eran suyas, o bien el bosque de casuarinas en el que posteriormente se construiría el hospital minero, de la misma propietaria.

En cuanto a la tipología arquitectónica a la que corresponde, el inmueble  es un  palacete neoclásico  inspirado en el Petit Trianon de Versalles. Hay que apuntar en ese sentido que la gran mayoría de   las grandes corporaciones  industriales españolas y  europeas de la época gustaban de  construir sedes más o menos faraónicas  en las zonas nobles de las ciudades en las que desarrollaban su actividad empleando en ellas, además, otros estilos más actuales como el   modernismo o el eclecticismo. No hace falta ser muy listo  para saber que las razones que justificaban estos  iconos currantes eran el  prestigio, la imagen,  la pura ostentación y si no valía ninguna de ellas  pues porque podían permitírselo.

El palacio de la tinta, en Málaga, es un ejemplo  cercano de palacete construido  por FFCC Andaluces, monopolística en el Guadiato hasta 1900   



Espacio cultural Fundacion |Arte y Cultura|Fundacion Mutua Madrileña
Un ejemplo de sede empresarial  lejano: antigua sede de la Real Compañía Asturiana de Minas en  Madrid, de estilo ecléctico

Hasta aquí las presuntas causas por las que fue pensado este bonito y lujoso edificio pero, ¿Qué hay de  los motivos por los que finalmente no  fue levantado? Puestos a seguir especulando consideramos que  quedó en el papel  debido a un cambio repentino, evidentemente  a peor,  de las condiciones económicas de la multinacional francesa. Entre los factores que provocaron ese cambio está el fin del lucrativo negocio  de  la Gran Guerra (1918), la implantación de la jornada de 8 horas (1919) que encareció los costes laborales de forma exponencial y, por último, las exigencias nacionalizadoras del gobierno autoritario de Miguel Primo de Rivera (1923) las cuales también condicionaron el desempeño de la misma en España.

A partir de este punto y a pesar de la introducción de testimoniales innovaciones tecnológicas en  algunas industrias del Cerco todo comenzó  a ser olvido,  cierres y prisas por marcharse para la SMMP en Pueblonuevo del Terrible. Tan sólo  la intervención del Gobierno Republicano   y un país  arruinado y sin industria debido a la guerra civil frenaron el cierre de la fundición y la huida de la SMMP mucho antes.   De modo que la ambición napoleónica  de construir un bonito  palacete a mayor gloria de los irreductibles galos se dejaría para un mejor momento que nunca llegaría. Las oficinas de la fundición se mantuvieron  en el monumental  edificio de la Dirección hasta 1961, transformándose el palacete previsto, como en el cuento de La Cenicienta, en una vivienda  calabaza.

El último edificio que albergó las oficinas de la fundición de la SMMP no fue precisamente un palacete

Todo lo expuesto aquí, evidentemente es arqueología-ficción  de un sueño   arquitectónico que tuvo  una de las grandes empresas que un día vio el mundo en un momento puntual de  la historia, un mundo que ya no existe. Sin embargo, el boceto de la sede que nunca fue, con su reloj, con sus blasones,  con su belleza antigua  habla  de la  impotencia de lograr lo que se quiere, pero también de la voluntad de  permanencia de quienes dirigieron esta compañía en aquella época.

El baúl de la  humanidad está repleto de fósiles de empresas, de países y de ciudades  aspirantes a imperios. También  de imperios, países y ciudades  que fueron pero que  dejaron de serlo. Quedan fuera los lugares de los  que nadie sabe nada  porque nunca fueron y son mayoría.  Este cianotipo  de algo que  jamás existió  nos  recuerda que el lugar  que elegimos para vivir o  en el que nacimos por pura casualidad  existe, al menos, en los inútiles libros de  historia. Apreciemos pues este privilegio que no a todos les ha sido concedido.

Una vez más  aprovechamos la noticia sobre esta nueva donación  para  hacerles partícipes de  la importancia de entregar el material histórico encontrado o heredado a las  instituciones filantrópicas que velan por su custodia y conservación. Es la única certeza de  que este tenga alguna oportunidad de saltar a la siguiente generación y  de sobrevivir  en el tiempo tras nuestro paso fugaz por este amado  y a veces no tan amado mundo.

 Noticia ofrecida  por:

 



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