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jueves, 21 de junio de 2018

A la búsqueda de ayuda internacional para nuestra chimenea



Todos los que viven en Peñarroya-Pueblonuevo tienen ya una idea aproximada de la dimensión que llegó a alcanzar la Sociedad Minera y Metalúrgica en nuestra zona y en las provincias limítrofes de Badajoz y Ciudad Real, pero lo que  mucha gente todavía no sabe es que fue una multinacional con miles de trabajadores repartidos por medio mundo: Francia, Grecia, Italia, las Repúblicas exyugoslavas, Marruecos, Turquía, Argentina… son solos algunos ejemplos  de países en los que la empresa Peñarroya dejó su impronta desde  un punto de vista económico, cultural y social, al igual que en esta localidad del Guadiato.

El cierre de su última factoría, en Noyelles Godault (Francia) en 2004 y su liquidación  supuso el fin de una bonita historia de más de un siglo emprendida por los más importantes hombres de negocios de Europa, una singladura repleta de retos, obstáculos y beneficios para las sociedades en las que se instaló pero que, sobre todo, dejó una legado repleto de viejas fábricas metalúrgicas, edificios civiles y una sensación de orfandad tras su desaparición de la que aún no nos hemos recuperado. 
Con la P de Peñarroya. Cerco Industrial de la Compañía  Peñarroya
 en Noyelles Godault (Francia)


Bien sabemos que no es posible reescribir la historia industrial de estos municipios unidos por esas 4 iniciales, SMMP, para hacerla, si quiera, más amable. Los pueblos y ciudades  SMMP tienen que reinventarse, encontrar, esta vez sin ayuda, una identidad, una nueva forma de sobrevivir en este mundo global, imprevisible y cruel con los no adaptados.

La gran  mayoría de estos municipios aún sigue preguntándose hacían dónde ir tras décadas al amparo de esta empresa. Sus líderes públicos, sus ciudadanos, su tejido empresarial y social tienen ante sí la enorme tarea de encontrar un sitio de progreso alejado, esta vez, si, del carbón y del metal. Sólo el futuro, el  talento que les ha quedado y, sobre todo, su suerte saben si  lograrán este objetivo. A todos ellos les decimos que seremos comprensivos si no lo consiguen dada la extrema dificultad del reto de transformar  una ciudad que pertenecía a una empresa en una ciudad con empresas diferentes en un contexto claramente deslocalizador.

Sin embargo,   lo que no podemos rehuir es nuestro deber  por preservar el Patrimonio Industrial que hoy nos une a todos en forma de ferrocarriles, fábricas, pozos mineros y chimeneas. 
ACED Matallia, Asociación de ex-trabajadores de la Compañía
Peñarroya en Noyelles Godault (Francia) defienden el Patrimonio material 
e inmaterial de nuestra empresa.


Esta herencia común lleva desapareciendo sin freno desde hace décadas, bajo el voraz poder especulativo de la industria inmobiliaria o bajo las teorías  ecologistas y ecologicistas  que se han convertido en una moderna y sutil  forma de intolerancia con unos recintos que significan mucho para  mucha gente y que podrían ser reciclados para acoger nuevos servicios públicos o privados, bien sean  sociales, culturales, económicos o turísticos.

A diario asistimos, perplejos, absortos en nuestra propia desesperanza por el paraíso perdido, a la desaparición de nuestros lugares de la memoria colectiva.

Es por ello que se hace necesario que las entidades culturales, autoridades y sociedad civil  como los que nos reuniremos en Noyelles Godault el próximo fin de semana comencemos, ya en serio, a luchar  por la preservación de nuestras señas de identidad, una lucha que,  sin duda,  es compatible con la búsqueda de un futuro mejor para nuestros vecinos.

Peñarroya-Pueblonuevo, como origen de aquella epopeya empresarial,  quiere ser de nuevo pionera, esta vez en la protección patrimonial y medioambiental de su legado histórico. 

Nuestra fundición de plomo, en cerámica.
El Cerco Industrial de Peñarroya en España es, pese a su estado
un referente para lo ex-trabajadores de Peñarroya
de medio mundo. Algunos han empezado a organizarse
Fruto de todo este trabajo concienzudo ha sido la inclusión del viejo complejo  industrial de la SMMP en el Catálogo Andaluz de Patrimonio histórico y la creación de una ruta cicloturista sobre un ferrocarril creado por la SMMP que hoy recibe miles de visitantes al año.

No contentos con ello, en la actualidad, el colectivo de La Maquinilla está llevando a cabo un ambicioso proyecto  de restauración de una chimenea de la SMMP, un proyecto inclusivo e integrador en el que están participando todos los ciudadanos del pueblo y que está llamado a ser a la vez  el auténtico símbolo del cambio patrimonial que los municipios unidos un buen día  por esta compañía están llamados a realizar. Como herederos universales de este patrimonio contamos con los amigos de ACED Metallia y el municipio de Noyelles Godault para hacerlo posible. Les invitamos perseverar en la protección y recuperación de nuestras señas de identidad industrial con independencia de nuestro destino, sea metalúrgico o no.

Bien es cierto que el futuro no lo conocemos, pero  lo que tenemos claro es que  nuestro pasado común puede tener aún mucho futuro. Construyámoslo juntos.

Un Cerco que cabe en  una rotonda. Esto es todo lo que queda
del Cerco de Peñarroya en Noyelles Godault
Así de triste. Así de inútil. Así de estúpido







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